Cada vez que la luna brilla en la solitaria ciudad de Tarkers Mills se producen horribles escena de terror. Nadie sabe quién será la próxima victima.
Pero sí hay una certeza.
Cuando la luna se muestre en todo su esplendor se escucharan, en el viento, gruñidos parecidos a palabras humanas. Y por todas partes aparecerán huellas de un monstruo insaciable. Un hombre lobo.
Este es un libro exageradamente corto. Yo ya sabía que era corto, lo había leído en algún lado, pero tampoco así. Al principio cuando abrí el archivo Epub. Para ver cuántas páginas tenia, y eran 111. Me dije a mí mismo: ok, estará bien. Pero resulta que todo es más corto que eso. Resulta que, contando, son solo, según recuerdo, 53pags. Mientras que las otras 58 se dedican únicamente para la portada, introducción y un sinfín de ilustraciones hechas por un hombre que merece de algunos aplausos por crear imágenes que representan muy bien, luego de cada capítulo, lo que leímos dos segundos antes de cambiar la pagina. Mis agradecimientos al ilustrador.
Este es el primer reto de lectura del mes de abril, el mes de mi cumpleaños y me encanta que el terror hubiera sido lo primero pues soy muy fanático del él. Por lo que me propuse leer algo (y como lo describía Wikipedia) de horror.
Pero en estas cortas paginas pues que puedo decir… se quedaron cortas. No me dio miedo como libros anteriores de terror que he leído. Libros a lo que puedo llamar unos Perturba-mentes. Este no causó ese impacto. Lamentable para Stephen King.
Está narrado yendo de mes en mes. Enero; febrero; marzo; abril y pues así.
En los primeros tres meses del libro supe, muy bien, apreciar el color AMARILLENTO de los ojos del hombre lobo. Pero luego Stephen King me viene con que los ojos del hombre lobo brillaban como linternas verdosas.
Grave error que por muy reconocido que sea parece que nadie, ni King, se atreven a cambiar.
Volviendo a los meses. Esos capítulos cortos se me hacían muy largos. Pues eran una muerte por mes, y cada vez que leía algo era como que en mi mente se encendiera una luz roja de alerta que me decía a cada momento que la historia no iba a llegar a ningún lado. Porque no hay mucho avance cuando solo se va de muerte en muerte sin narrar nada más que eso. Un ejemplo de esto sería la colección de películas de Destino Final; que de muerte en muerte no se llega a ningún punto si no hay otra cosa a la cual prestarle atención.
La luz roja en mi cabeza se fue desvaneciendo poco a poco cuando las cosas empezaron a avanzar, muy lento, pero al menos había algo con lo que estar al tanto pues se sabía que esa parte donde empezó a avanzar, sería la que terminaría con todo; con la historia del chico invalido.
Con respecto a la narración, está muy bien hecha, no es ni más ni menos descriptiva… normal en el escritor.
Volviendo a las ilustraciones, y no creo que sea un spoiler de gran importancia, realmente no me di nada de cuenta la ausencia del ojo de la bestia sino fue hasta que lo nombraron, eso seria normal en un libro cualquiera, sin imágenes, pero este sí las tiene al inicio y al final de cada capitulo. El punto es que en todas las imágenes que vi luego del accidente del ojo, nunca me di cuenta de su ausencia. Y yo como alguien que sabe sobre dibujo, pues dibujo, digo que el ilustrador debía resaltar más ese hecho porque el accidente no fue nada simple, una herida visible tuvo que haber quedado allí… pero no se vio.
El final es pues… el final, quizás en esta época no me haya parecido nada impresionante pero quizás a las personas de los ochenta les haya impactado. Pero yo lo estoy leyendo ahora. Y lo juzgaré y criticaré como si fuera un libro recién lanzado al mercado de la literatura.
El final es un poco predecible.
Al final… lo último que tengo que decir del libro es que a pesar de cada muerte en cada mes y lo repetitivo que se hacía de vez en cuando. Era creativo en cuanto a muerte se trataba, y muy bien al crear los personajes a quienes mataba.
Mi puntuación es de:
5.4/10
¿Lo recomendaría?
Lo salvan las ilustraciones y los capítulos cortos. Es lo más atractivo de todo y es por lo cual le diría a alguien: lee este libro. En lugar de decirle que lo evite.
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